domingo, 27 de septiembre de 2009


Ambition makes you look pretty ugly
Kicking and squealing gucci little piggy
You don't remember
You don't remember

¿ésto es democracia?


Hace unas semanas (justo con el escandalo de la nueva ley de medios "K"...segun TN) salieron estos carteles en repudio a Clarín, duraron muy poco en la calle, no sé si se dieron cuenta, porque hay gente que ni siquiera los vio.
¡Basta de discrimar, estamos en democracia!

jueves, 24 de septiembre de 2009

La industria cultural comienza junto con el “Taylorismo” y el “Fordismo”, donde se decide que el trabajador produzca de forma mecánica, en menos tiempo mas producción, aplicando ciertas características como la línea de montaje, la producción en serie, la estandarización e ínter cambiabilidad de piezas. Como dice en el texto “La administración científica”:el obrero es el mercado, es decir , dándole la posibilidad de crédito al obrero, está habilitado a consumir, y si hay demanda, hay consumo.
El Taylorismo provoca que el sujeto produzca de manera mecánica, pase del trabajo artesanal (donde hay originalidad en cada objeto) a la producción en serie (donde todo objeto es construido de igual manera, pasando por máquinas que realizan siempre los mismos movimientos), éste se puede ejemplificar muy bien en la película de Chaplín que muestran a los obreros realizando el mismo movimiento en cada producción, al sujeto lo utilizan como objeto productivo, pasando a ser un engranaje mas en la maquinización.
El trabajo es externo al trabajador, los mismos ámbitos laborales lo alienan de su identidad, éste se niega infelizmente, apesadumbrándose, sólo se reconoce fuera del oficio y no dentro de él, a la hora de finalizar calma sus necesidades con la industria cultural, ella lo enajena y permite que no se cuestione nada de su rutina.
El fordismo se halla ubicado en la sociedad de masas, donde la producción material se encuentra vinculada a la falsa identidad universal y personal.
Las películas y la radio no tienen ya mas necesidad de hacerse pasar por arte, señala Adorno, ya que la producción cultural se analiza desde una lógica industrial pasando a ser negocios que solo sirven de ideologías, transformándose en métodos de reproducción que conducen la manipulación del deseo de las personas, provocando que la gente satisfaga su necesidad con productos estándares.
La libertad sólo existe cuando se realiza una elección en un marco caracterizado por la independencia de los deseos.
Un ejemplo estereotipado de la necesidad de los consumidores son los clichés, que conforman un circulo de manipulación, alienando al público, por ejemplo en “Patas arriba” Galeano afirma: ...“la otra realidad, la de los personajes, sustituye la realidad de la personas, mientras transcurre cada capítulo, y durante ese tiempo mágico la televisión es el templo portátil que brinda EVASIÓN, redención y salvación a las almas sin amparo”...
La producción en serie termina siendo una evasión eficaz para los sectores dominantes, ya que uno se encuentra ajeno a su propia identidad y es mas fácil de manejar.
Si se analiza esquemáticamente una película de Warner Brothers, quizás sin mirar el final se sabrá de antemano como terminará, ya que generalmente están basadas en clichés para encantar la atención del público y que cada persona salga del cine maravillado por los ideales actores, y la feliz historia que acaba de ver.
Dicha película no dejará pensar a los espectadores y les atrofiará la expresión, todo va a estar armado para que la imaginación del público no vaya mas allá, mejor explicado por Adorno: “...los productos están hechos de forma tal que la percepción adecuada exija rapidez de intuición, dotes e observación, competencia especifica, pero prohíbe también la actividad mental del espectador, si éste o quiere perder los hechos que le pasan rápidamente delante”...
Los productos de la industria cultural son consumidos rápidamente, cada uno de ellos es un gran modelo de capital, y provocan que el deseo, no sólo nos imponga el “tu debes”, sino también el “tu quieres”. El sujeto deja de ser sujeto, y pasa a ser objeto, disfrazando quien verdaderamente es por un “deseo”que le imponen, y éste accede para luego ser aceptado en la sociedad
La tarea de la prudencia es buscar la génesis de esos deseos, para poder negarlos o afirmarlos de manera tal que se pueda encontrar la propia libertad.
“la cultura comenzó a revestir cada vez mas las formas del mercado y la producción industrial, pasando de actores-espectadores a productores-consumidores”...
Cada objeto cultural es ideado como un producto, al que se le designa un valor económico que va mas allá de lo artístico o lo filosófico, de ésta manera el mercado se encarga de quitarle la escencia, y buscar una oferta ideal, para ser producido y luego demandado por la sociedad.
“La industria cultural es la industria de la diversión” debido a que enajena, provoca que el individuo esté de acuerdo con su forma de vida y escape de su realidad. El espectador, no debe necesitar de ningún pensamiento propio, debe negar el pensamiento crítico. Por ejemplo debe divertirse con la TV burlándose de una desgracia ajena. La industria cultural introduce en la conciencia del público maneras de ver, pensar y sentir la realidad dejándose manejar fácilmente de lo contrario, si el trabajador, obrero, tendría un criterio válido, se revolucionaría trayendo problemas al Sector Dominante.